Cómo luchan los extranjeros por Ucrania

Rostyslav Fedorko es una personalidad extraordinaria. Sus intereses van desde las ciencias exactas, los conocimientos técnicos y las lenguas extranjeras hasta las vocaciones académicas y la cultura del anime. Este hombre luchó por la causa ucraniana como activista cívico, logró distinguirse en el frente cultural y no rehuyó el voluntariado. Todo ello, tradicionalmente, a un alto nivel, con resultados bastante significativos. Sin embargo, Rostyslav decidió que no estaba haciendo lo suficiente por la causa ucraniana, así que se alistó en las Fuerzas Armadas y lleva dos años combatiendo en las filas de la Legión Internacional de Defensa de Ucrania. Ofrecemos al lector vívidas observaciones del legionario sobre individuos que vinieron de distintas partes del mundo para apoyar con armas y valor a los ucranianos en la lucha contra los invasores rusos. 

En 2013, Rostyslav llegó a la capital para estudiar en el Instituto Politécnico Igor Sikorsky de Kyiv.

Más tarde, se convirtió en un participante activo en la Revolución de la Dignidad y, desde entonces, el compromiso cívico ha sido una parte clave de su vida como patriota:
- «Por aquel entonces, luché por Ucrania de formas no militares. Era activismo cultural y social. Promovíamos el ucraniano tanto como podíamos. Básicamente, la guerra se convirtió en una continuación lógica de mi vida», concluye el legionario.

«Durante la Operación Anti-terrorista, Rostyslav participó en actividades de voluntariado: ayudó al batallón de St. Se interesaba activamente por la traducción. Aprendió inglés tan bien por su cuenta que trabajó como traductor de textos técnicos especializados antes de firmar oficialmente un contrato con las Fuerzas Armadas de Ucrania en 2023.

Rostyslav participaba en la vida de su comunidad eclesiástica y era el vocalista del grupo musical de la comunidad. Incluso durante su servicio militar, encontró la oportunidad de estudiar canto a distancia.

- En 2014, mis amigos me introdujeron en la cultura japonesa. Y organicé reuniones y actividades del club de anime Mitsuruki. Al principio, era un club de Kyiv, luego pasó a ser de toda Ucrania. Las actividades de este club tenían como objetivo ucranianizar la cultura del anime, porque antes, como en muchos otros lugares, el anime en Ucrania se veía en ruso. Y teníamos que demostrar, argumentar y mostrar a la gente que había anime en ucraniano. Y trabajamos en esa dirección», nos cuenta Rostyslav.

El estallido de la agresión rusa a gran escala puso al voluntario ante una elección lógica. Era muy consciente del peso y las consecuencias de las posibles decisiones:
- «Durante unos 20 segundos estuve muy asustado. Me di cuenta de que si seguía, digamos, por el camino de la guerra, participando en esta guerra, podría enfrentarme a la muerte, a heridas. Pedí valor a Dios, recé mentalmente, y el miedo desapareció. E inmediatamente empezamos a actuar: primero, nos reunimos con amigos en nuestro apartamento, y desde allí fuimos a organizar la resistencia. Aceptamos a las primeras personas, recibimos las primeras armas, formamos unidades en coordinación con representantes de las Fuerzas Armadas de Ucrania», cuenta el sargento subalterno sobre el momento de la verdad y la elección clave en su vida.

Durante la defensa de la región de Kyiv, su dedicación, eficacia y responsabilidad no le permitieron apartarse del cumplimiento de sus obligaciones: 
- «Tenía que asignar cada ametralladora a alguien, anotar quiénes eran esas personas, organizar su trabajo, y durante la primera semana no salí físicamente de este sótano en absoluto y, de hecho, pasé la mayor parte del tiempo en esa actividad burocrática. Todos mis amigos de Kyiv me contaban historias de cómo un cohete había impactado en su casa delante de ellos, de cómo derribaban aviones. Yo no vi nada de eso, sólo oí las explosiones. Y de alguna manera siento que mi experiencia fue diferente de la de los demás durante ese periodo», recuerda Rostyslav. Este estado de cosas no le gustaba al patriota, así que a la primera oportunidad decidió cambiar su posición en la retaguardia.

Muchos extranjeros se alistaron en la unidad de voluntarios en la que servía. A Rostyslav, que hablaba bien inglés, le asignaron la tarea de comunicarse con ellos. De hecho, uno de estos extranjeros le informó sobre los puestos en la Legión Internacional de Defensa de Ucrania, adonde se había trasladado un poco antes. 

- Por aquel entonces, trabajaba formalmente como traductor y me sentía un poco «fuera de lugar» en la vida civil. A pesar de que no asalté los desembarcos, no era un «rex», ya estaba buscando opciones para volver a participar en esta guerra. Llamé a un reclutador, y 3 días después, el 17 de agosto de 2023, ya estaba en el punto de despliegue permanente de la unidad militar», cuenta el legionario.

«Sobre todo, Rostyslav Fedorko, que en aquella época ya estaba bastante familiarizado con las particularidades militares, quedó impresionado por la gente:
- «Un irlandés, medio de ascendencia brasileña, sirvió con nosotros. Un hombre que se sentía igual de cómodo tanto con sus colegas anglófonos como con los latinoamericanos. Combina todos estos rasgos y es un temerario increíble con el que es divertido estar en cualquier circunstancia. Llevó a cabo misiones difíciles, salió sano y salvo de muchas batallas y ahora está en casa», dice el sargento subalterno sobre su camarada.

«En general, las relaciones en la unidad son éticas. Se ha formado un sistema estable de normas comunes entre personas de culturas completamente diferentes, en el que todos respetan los límites personales de los demás. No hay conflictos irresolubles, todos se toleran, entendiendo que esto es necesario para el entendimiento, la eficacia y la consecución de un objetivo común. En un ambiente así, los rasgos y diferencias de las culturas individuales no se borran. Simplemente se forman tradiciones comunes que no afectan a su identidad y, en consecuencia, todos pueden trabajar en un mismo equipo.

La guerra es una situación extrema especial, y el carácter de las personas también se manifiesta de forma particular:
- Los más responsables suelen ser aquellos de quienes no te lo esperas. En particular, cuando se produce una situación difícil, especialmente asaltos activos del enemigo, bombardeos intensos, hay personas que quizá no hayan sido las más obedientes y disciplinadas en la vida cotidiana del ejército, que se comportan desesperadamente e incluso parecen un poco locas. Pero son los que se quedaron en los momentos más difíciles, aguantaron todos esos días duros, y luego se convirtieron en las personas que conocemos de siempre», dice Rostyslav.

En la unidad del sargento junior sirven representantes de unos 30 países. El defensa comparte interesantes observaciones sobre sus características y preferencias:
- «Los japoneses, en general, me han justificado el estereotipo que tenía de ellos. Son personas organizadas, auto disciplinadas, a las que no les da pereza hacer ejercicios por la mañana, se entrenan para mantenerse en forma por su cuenta y sin órdenes, se interesan por todo lo que hacen, tratan de entenderlo, estudiarlo y comprender su esencia. Son muy educados. Al mismo tiempo, son tiradores precisos. 

Los británicos y neozelandeses son proactivos, temerarios y, en general, buenos soldados. Saben organizarse entre ellos. No se encontrará con un británico solo. Forman un pequeño grupo y actúan como tal, sabiendo ser siempre solidarios entre sí. 

Los colombianos tienen un gran sentido del humor, son espontáneos y sus casas están siempre muy bien decoradas. A veces ves una vieja casa de primera línea abandonada donde el dueño murió hace diez años, donde todo está sucio. En cuanto entran los colombianos, a pesar de los bombardeos y los combates, lo lavan todo, ordenan cuidadosamente los restos de muebles e intentan organizar algún tipo de vida. Incluso en esas condiciones, los colombianos que luchan en nuestra unidad son muy ordenados en su vida cotidiana.

Como muchos soldados, Rostyslav, a pesar de sus numerosas misiones exitosas, se muestra reacio a recordar situaciones de combate, diciendo modestamente que no las considera nada fuera de lo común. En cambio, se complace en hablar de las brillantes personalidades de sus compañeros.

- «Teníamos un teniente en el ejército brasileño al que llamábamos “Aquaman” porque se parecía literalmente a Jason Momoa. Era muy carismático y nos llamaba legionarios de la misma forma que los antiguos legionarios romanos. Se ponía en fila antes de cada rotación y animaba a los demás con cánticos sencillos. «Charlie», “Esparta”, “Familia de legionarios”. Siempre improvisaba qué gritar, y todos, gracias a su respeto y carisma, le apoyaban. Sirviendo como comandante de compañía, siempre tomaba posiciones él mismo. Incluso cuando estaba herido. Volvía después de recibir tratamiento médico y seguía yendo a las posiciones con el hombro herido. Hubo un caso en el que derribó un dron desde 200 metros con su fusil FN FAL favorito, ¡que también se utiliza en el ejército brasileño! Es muy difícil.

El tiempo de la breve entrevista pasó rápido, dejándonos muchas impresiones y pensamientos profundos. La calma, el autocontrol y el equilibrio del interlocutor en cada palabra nos habrían dado la impresión de que estábamos hablando con un profesor universitario, no con un guerrero experimentado que acababa de llegar de la zona de guerra y volvería allí muy pronto. Al fin y al cabo, los compañeros de armas de Rostyslav, una familia formada por las mejores personalidades de casi todo el mundo, la Legión Internacional de Defensa de Ucrania, están realizando misiones de combate allí, en la línea de contacto, disuadiendo a la amenaza más peligrosa para la humanidad moderna.

Volodymyr Patola

Fotografía de Oleksandr Zakletskyi

Como referencia:
La Legión Internacional de Defensa de Ucrania opera en forma de unidades militares dentro de las Fuerzas Terrestres de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

El personal de la Legión Internacional de Defensa de Ucrania son militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania, desempeñan las mismas funciones y disfrutan de los mismos derechos, incluida la seguridad financiera y social, que los demás militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania. 

Los ciudadanos de otros países sirven en la Legión Internacional de Defensa de Ucrania junto con los ucranianos.

En este caso, los extranjeros pueden celebrar el primer contrato de servicio militar en la Legión Internacional de Defensa de Ucrania por un período de 6 meses.

Puede ponerse en contacto con los representantes de la Legión Internacional de Defensa de Ucrania sobre cuestiones relacionadas con el servicio siguiendo el enlace https://ildu.legion.army/

El buzón oficial al que los candidatos al servicio en la Legión Internacional de Defensa de Ucrania pueden enviar sus solicitudes es [email protected].